Cómo enviar un mensaje atractivo por LinkedIn

Hola amig@s,

Mi post de hoy va dirigido a todas aquellas personas que están en un momento de transición profesional y que utilizan LinkedIn, como yo le he apodado alguna que otra vez “el rey de las redes profesionales”, como vía para encontrar un nuevo proyecto profesional.

Como ya sabéis esta red nos facilita acceder y contactar con futuros empleadores de una forma rápida. Invitar a una persona a nuestra red es sencillo, pero en el momento de la verdad, en el que tenemos que enviar un mensaje privado he detectado algunos errores muy comunes.

Mis 5 consejos

1. Antes de enviar un mensaje verifica el perfil de esa persona y asegúrate que es la indicada.

Como muchos ya sabéis antes de iniciar mi nuevo proyecto profesional, atravesé también este periodo de búsqueda de empleo y fueron bastantes las personas que se pusieron en contacto conmigo pidiéndome que “les tuviera en cuenta en los procesos de selección de mi empresa”, lo cual me demuestra que no se detuvieron a leer mi perfil ya que de ser así hubieran visto que no estaba en activo.


Evidentemente esto provoca en el reclutador una imagen muy desfavorable y poco exclusiva, ya que da la sensación de que el candidato está enviando muchos mensajes sin ningún tipo de filtro.

Dentro del ámbito de RRHH, existen una variedad de ramas (selección, formación, orientación, desarrollo, personal, etc.) si deseas contactar con una persona de este departamento asegúrate que se responsabiliza de la selección del personal.

2. El mensaje tiene que ser personalizado.

Olvidémonos de la cantidad y demos prioridad a la calidad. ¿Sabéis cuantos mensajes al día puede recibir un reclutador? Sin lugar a dudas con los tiempos que corren ¡muchos!, pues envía un mensaje potente e individualizado.

Los mensajes estándar  “Soy… Me dedico a…. Si tenéis algún proceso agradecería que me tuvierais en consideración” pasan desapercibidos. Yo sinceramente lo que pienso cuando recibo esto es “otro más”.

Diferenciación, esto es lo que se debe lograr. Piensa en qué es lo que te llama la atención del otro, qué aspectos compartís y a partir de ahí ¡al ataque!

Una buena estrategia para captar su atención es compartir un artículo de prensa o alguna información que al otro le podría interesar.

3. Ten presente la relación “win-win”.

Otra característica común es hablar en todo el mensaje de “yo”, “yo” y “yo”. ¡Error! Contactamos con esa persona porque creemos que nos podemos aportar algo el uno al otro.

LinkedIn es una red que facilita el networking, y esto significa que existe una relación de beneficio mutuo.


Antes de redactar el mensaje ¿te has informado de las carencias que puede tener la empresa y dónde podríais aportaros? Si contactas con el que podría ser tu superior inmediato ¿has analizado el perfil del contacto y observado en qué áreas os complementáis? ¿Qué te diferencia de otros candidatos con un perfil similar al tuyo? Estos y otros aspectos más son los que hay que tener presentes.

4. Redacta un mensaje breve y conciso.

No es necesario hablar en tu mensaje de toda tu trayectoria profesional o formación, eso está reflejado en tu LinkedIn. Aprovecha para enfatizar tus motivaciones, logros profesionales y aquellos aspectos de tu perfil que podrían agradar al receptor.

5. Escribe un cierre de mensaje adecuado.

Escribir en el cierre del mensaje frases tipo "agradecería me tuvierais en cuenta”, “quedo a vuestra disposición para cualquier información que preciséis ampliar” indica poca proactividad. ¡No estamos escribiendo una carta de presentación! Utilizar fórmulas tipo “estaría encantado que nos pudiéramos conocer con el objetivo de…” o “me gustaría…”.

Por otro lado, evitar palabras tipo “entrevista”, “procesos de selección” y “búsqueda de empleo”, volveremos a crear esa sensación que os comentaba de  “otro más”.


Ahora que ya lo tienes ¡a por ello!